La Formación Continua es imprescindible si queremos que nuestra empresa siga siendo competitiva.
Vivimos en un contexto de cambio constante, y los equipos de trabajo necesitan mantener la curiosidad suficiente para seguir aprendiendo nuevas habilidades.
Sin embargo, la reacción natural de todos nosotros es mostrar resistencia al cambio, sobre todo, si las cosas hasta ahora han funcionado bien.
Por tanto, el reto al que se enfrentan las organizaciones actualmente es diseñar un Plan de Formación que realmente motive a los empleados y que permita incorporar nuevas habilidades en los equipos.
¿Cómo motivar al equipo a continuar formándose y aplicar nuevo conocimiento a su trabajo?
Para responder a esta pregunta, hay que remontarse a unos años atrás, más concretamente, a nuestra infancia.
La Psicología del Desarrollo ha estudiado el papel de juego en el aprendizaje de los niños.
El juego facilita el aprendizaje porque permite simular la realidad e interaccionar en un contexto psicológicamente seguro.
Los juegos requieren aprender una conducta determinada, aplicando unas reglas que se pueden modificar si se llega a un consenso.
Esta capacidad de aprender nuevas conductas a través del juego sigue aplicándose a lo largo del ciclo vital de la persona y es el principio en el que se aploya la Gamificación.
Aprender conceptos complejos jugando entre todos
Las estrategias de Gamificación permiten que las personas sientan curiosidad y motivación por participar en cursos y talleres.
En un estudio llevado a cabo por Nëlle Fabre Mitjans en la Universidad de Barcelona se mostró como incorporar las plataformas como Kahoot y Quizizz en clase de ciencias aumenta la motivación del alumnado.
Actualmente disponemos de muchas herramientas para incorporar la Gamificación en los planes formativos de las organizaciones.
Por ejemplo, en nuestra Formación Bonificada sobre Gestión de Proyectos de Innovación nos apoyamos en la Gamificación y en el Aprendizaje Basado en Proyectos para formar a nuestros alumnos.
Las formaciones clásicas de transmisión de información, están evolucionando en talleres interactivos en los el docente comparte y construye conocimiento con los estudiantes.
¿Cómo incorporar la gamificación en las acciones formativas de mi Empresa?
En el estudio de Neëlle Fabre Mitjans se identifican 4 etapas para aplicar la gamificación en una acción formativa. Esto aplica también en la Formación Continua de los empleados.
1. Crear Conciencia sobre la Importancia de desarrollar Nuevas Habilidades
Es fundamental que el Equipo comprenda por qué necesita adquirir nuevas habilidades.
La Formación Continua debe verse como un reto asumible que va a permitir en un mejor desarrollo a nivel individual y de equipo.
En esta etapa, se puede crear un cuestionario inicial en Kahoot o Quizizz para identificar los temas relevantes para el equipo y las áreas que les gustaría mejorar.
Esta toma de decisión colaborativa permite que los participantes sientan que tienen cierto control sobre su formación y que por tanto, aumente su motivación por participar en los cursos.
2. Generar Interés a Través de Competencia Amigable
Una vez que el equipo entiende el valor del aprendizaje, es hora de despertar el interés.
Estimular una competencia saludable a través del juego aumenta la motivación por participar.
Si además, esta competición se establece por equipos, podemos mejorar la comunicación y la cohesión dentro del equipo.
Una actividad para esta etapa puede consistir en dividir al equipo en grupos y asignarles un cuestionario en plataformas como Quizizz.
Se anima a los equipos a competir de manera amistosa y el equipo ganador recibe un premio simbólico.
El importante que el premio tenga un componente lúdico, por ejemplo, un trofeo de plástico o poder tomarse el café durante un día en una taza especial diseñada para ganadores de los Quizz.
3. Fomentar la Colaboración para un Aprendizaje Más Profundo
La etapa de colaboración es importante para que el equipo aprenda a apoyarse mutuamente mientras aprenden.
La investigación muestra que el Trabajo en Equipo, no solo incrementa la motivación, sino que también facilita una comprensión más profunda de los conceptos.
En esta etapa, en INTERFOCUS nos centramos en el Aprendizaje Basado en Proyectos. Nuestro objetivo es que los estudiantes trabajen en equipo para desarrollar un proyecto que les permita aplicar lo aprendido en su puesto de trabajo.
En nuestra formación solemos plantear retos que estimulen el trabajo en equipo. El trabajo en equipo no es solo conseguir un objetivo, también consiste en saber gestionar las dinámicas grupales.
4. Consolidar el Conocimiento y Celebrar los Logros
Finalmente, una vez que el equipo ha pasado por las etapas de motivación y aprendizaje colaborativo, es importante consolidar lo aprendido y reconocer los logros alcanzados.
Este es el momento de reforzar los cambios y dar la oportunidad de aplicar lo aprendido haciendo una buena gestión del error.
Si quieres saber más sobre cómo gestionar el error, este artículo puede interesarte: Descubre los 4 Pasos para Gestionar el Error con Indagación Apreciativa.
Conclusión
La Formación Continua de los equipos de trabajo es más necesaria que nunca. La organización necesitan convertir la Resistencia al Cambio en una Oportunidad profesional.
La Psicología Organizacional dispone de herramientas para ayudar a las organizaciones a adaptarse al cambio y ser más productivas.
Para aflorar todo el potencial de los Equipos ofrecemos a nuestros clientes Coaching para Empresas y Formación Bonificada.
Si quieres incorporar a tu plan de Formación Continua nuevas habilidades para trabajar en equipo, podemos ayudarte.
Puedes visitar nuestra web: Coaching Innovación o contactarnos a través de nuestro formulario. También puedes dejar tu comentario al pie de este artículo.
